¿Te ha pasado que a veces te sientes super abrumada por cosas como la escuela, tu crush o hasta por diferencias con amigas, y no sabes qué hacer para sentirte mejor? Bueno, pues tal vez la solución sea una limpieza emocional.
¿Que qué es una limpieza emocional? Es un detox de toda la negatividad, de todos esos pensamientos que te llegan a torturar, de la tristeza y la apatía.
Haz este ritual con canela
Para lograrla tienes que hacer cosas como observar tus emociones y preguntarte de dónde vienen; identificar patrones negativos para cambiarlos; también ejercitarte y comer bien, entre otras cosas de las que podemos hablar más adelante.
Claro que sabemos que no es fácil comenzar, por eso queremos compartirte este ritual que hará las cosas más fáciles. ¡Toma nota!.
Necesitas:
Aceites esenciales (los que quieras)
Flores (las que quieras)
Lápiz y papel
Una vela
Procedimiento:
Elige un lugar en el que te sientas calmada y pon a tu alrededor las flores, la vela y los aceites; el chiste es que crees un ambiente que te haga sentir relajada y en paz.
Cierra tus ojos y haz respiraciones profundas, exhalando por la misma nariz, hasta que sientas que te empiezas a relajar.
Abre los ojos, toma el lápiz y el papel y empieza a escribir la situación que te ha estado molestando. Empieza por una cosa a la vez, este ritual lo puedes repetir cuantas veces sea necesario.
Escribe también cómo te hizo sentir y desde cuándo te sientes así.
Ahora escribe qué pasaría en tu vida y cómo te sentirías si dejas ir esa situación.
Escribe lo que aprendiste con todo lo que sucedió.
Escribe algo positivo que consideras que llegó a tu vida como resultado de la situación.
Escribe tu nombre completo, firma el papel, tómalo y dóblalo.
Ahora cierra los ojos, respira profundamente y di: `Agradezco todo lo que aprendí con esta situación, agradezco lo bueno y lo malo y dejo ir ese pasado que me tenía atada; me perdono y vivo en el presente, abriendo los brazos a todo lo bueno que está en mi vida´.
Abre los ojos y corta o rompe el papel. Deséchalo y despídete de él agradeciendo las lecciones que vino a enseñarte.
En ese momento empezarás a sentirte más ligera, así que ahora solo enfócate en las cosas positivas y vive tu presente, no te quedes en el pasado y tampoco te enfoques completamente en el futuro.